Tegucigalpa – La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) ha anunciado que desplegará observadores en los 18 departamentos de Honduras para monitorear el desarrollo de las elecciones primarias e internas que se celebrarán este domingo 9 de marzo. Carlos Hernández, director ejecutivo de la organización, reveló que implementarán un sistema independiente para verificar los resultados electorales.
«Tendremos un ejercicio de boca de urna, tendremos nuestro propio sistema de transmisión de resultados, obviamente que no nos cuesta 300 millones, es mucho más económico, es confiable», explicó Hernández, destacando la eficiencia de su iniciativa frente al costo del sistema oficial.
El directivo expresó su expectativa de que los resultados recopilados por ASJ coincidan con los datos oficiales que emita el Consejo Nacional Electoral (CNE), funcionando así como un mecanismo ciudadano que contribuya a garantizar la transparencia del proceso electoral.
Hernández hizo un llamado a la participación ciudadana, recordando a los hondureños habilitados para votar que acudan a las urnas este domingo. «A los partidos, si bien es cierto son elecciones internas, pero quienes las estamos financiando somos nosotros, entonces el pueblo tiene el derecho de exigir que el sistema biométrico funcione, porque nos cuesta mucha plata, que el TREP funcione porque nos cuesta mucha plata», afirmó.
El director de ASJ subrayó que estos comicios representan las elecciones más costosas en la historia del país. «Estamos pagando 100 millones de dólares, por lo tanto eso nos habilita para exigir transparencia, eficiencia y resultados en tiempo y forma», señaló.
Las elecciones del domingo contarán con la participación de los tres principales partidos políticos de Honduras (Nacional, Liberal y Libertad y Refundación – Libre) en el proceso de primarias, mientras que para las internas también se suma el partido Democracia Cristiana.
Este esfuerzo de observación independiente cobra especial relevancia en un contexto donde han surgido denuncias de posibles irregularidades por parte de diferentes actores políticos, como las recientes acusaciones cruzadas entre precandidatos que han llegado incluso a instancias del Ministerio Público.