Tegucigalpa – Han pasado dos largos años desde la desaparición de Angie Peña en la paradisíaca isla de Roatán, y la incertidumbre continúa envolviendo a su familia, que clama por respuestas que nunca llegan.
A pesar del tiempo transcurrido, las autoridades no han ofrecido ningún indicio sobre el paradero de la joven, dejando a sus seres queridos sumidos en la angustia y la espera constante.
En una reciente conferencia de prensa, la madre de Angie, Michelle Melgares, expresó su frustración ante la falta de acción por parte del Gobierno.
Acompañada por organizaciones de derechos humanos y el Comité Contra la Desaparición Forzada de la ONU, la familia sigue exigiendo respuestas que hasta el momento no han llegado.
La ausencia de Angie, quien desapareció misteriosamente el 1 de enero de 2022 durante sus vacaciones en la isla caribeña, sigue siendo una herida abierta para sus seres queridos.
A pesar de la falta de claridad, mantienen viva la esperanza de que algún día se hará justicia y se revelará la verdad sobre su desaparición.
La familia agradece el incansable esfuerzo de las organizaciones que continúan buscando respuestas sobre el destino de Angie Peña. Sin embargo, también demandan una acción más enérgica por parte del Estado hondureño en todos los casos de personas desaparecidas en el país.
Las organizaciones de derechos humanos no ocultan su preocupación por la aparente falta de compromiso del Estado en resolver los casos de desapariciones forzadas y en asumir su responsabilidad frente a esta alarmante situación.
Con más de 9 mil hondureños desaparecidos de manera forzada entre 2012 y 2022, la magnitud del problema es evidente y requiere una atención urgente y efectiva por parte de las autoridades.
En relación al caso de Angie Peña, la subsecretaria de Seguridad, Julissa Villanueva, ha señalado que, a pesar de la detención de una persona y el seguimiento de un juicio oral y público, aún no se ha encontrado evidencia que confirme su muerte.
El caso permanece abierto, representando un desafío continuo en la búsqueda de la verdad y la justicia para Angie y su familia.
