Tegucigalpa – La defensora de derechos de las mujeres, Honorina Rodríguez, generó debate al criticar los numerosos elogios dirigidos hacia la gerente financiera del Congreso Nacional, Krystal Orozco, tras la viralización de fotografías personales de la funcionaria en redes sociales.
«Las violencias contra las mujeres, disfrazada de elogios y otros. No es diferente a otras formas de violencia», señaló la reconocida feminista, quien considera que los comentarios sobre la apariencia física de Orozco representan una forma sutil pero dañina de agresión hacia las mujeres.
La polémica surgió después de que circularan varias fotografías de la gerente financiera del Poder Legislativo en diferentes ámbitos de su vida, imágenes que generaron una avalancha de comentarios en redes sociales centrados principalmente en su apariencia física, recibiendo múltiples elogios por su belleza.
Para Rodríguez y otros grupos feministas, estos aparentes halagos constituyen en realidad una manifestación de violencia de género. La activista equiparó estos elogios con «violencia simbólica y psicológica que descalifica y desvaloriza» a las mujeres en sus espacios profesionales.
«Los elogios anulan la capacidad, inteligencia y sabiduría de las mujeres… exhiben el cuerpo para los espectadores, todos como si fuera un gran mensaje», explicó Rodríguez, argumentando que este tipo de comentarios reducen a las mujeres a objetos de contemplación en lugar de reconocer sus capacidades profesionales.
La defensora hizo un llamado a la reflexión dirigido particularmente hacia quienes emiten este tipo de comentarios: «Es ahí cuando me pregunto, ¿no tendrán hijas, hermanas, tías, madres? ¿Les gusta que de esa misma forma se exhiba, desvalorice, minimice a sus hijas para empezar?», cuestionó.
Rodríguez también abordó el fenómeno de naturalización de estas prácticas, incluso entre las propias mujeres. «Entiendo que las mismas mujeres producto del patriarcado puedan ver eso como bueno, bonito o ganancia, pero lo cierto es que simplemente es desvalorizar y una forma más de ejercer violencia contra las mujeres», explicó.
Esta crítica se enmarca en un debate más amplio sobre cómo se percibe y trata a las mujeres que ocupan cargos públicos o posiciones de liderazgo, donde frecuentemente se prioriza su apariencia física por encima de sus capacidades profesionales o logros académicos.
El caso de Krystal Orozco, gerente financiera del Congreso Nacional, ilustra cómo las redes sociales pueden convertirse en espacios donde se perpetúan estereotipos de género, incluso cuando aparentemente se están ofreciendo cumplidos o reconocimientos positivos.
La posición de Rodríguez refleja una perspectiva feminista que busca visibilizar formas menos evidentes de discriminación de género, argumentando que la objetivación de las mujeres, aunque se presente como admiración, contribuye a mantener estructuras patriarcales que limitan el reconocimiento pleno de las capacidades femeninas en el ámbito público y profesional.