Tegucigalpa – Organizaciones indígenas mantienen este martes una toma pacífica del emblemático parque arqueológico de Copán Ruinas y diversos bloqueos en tramos estratégicos de la carretera CA-11, como medida de presión ante lo que consideran un sistemático incumplimiento de compromisos gubernamentales y el abandono de servicios básicos en sus comunidades.
La protesta, liderada por la Confederación Nacional de Pueblos Indígenas de Honduras (CONADIMCHH) y el Consejo Indígena Nacional Maya Chortí de Honduras, exige la presencia inmediata de una comisión del gobierno central para instalar una mesa de diálogo que aborde sus demandas prioritarias.
«Las promesas siguen en papel y nuestras comunidades siguen en el olvido. No hay maestros en las escuelas, no hay atención médica, no hay carreteras, pero sí hay promesas cada año», expresaron algunos de los manifestantes, quienes denuncian específicamente la falta de personal docente en centros educativos ubicados en comunidades indígenas, escasez de médicos y odontólogos en unidades de salud, carencia de medicamentos y el abandono de proyectos viales que afectan al menos a 10 comunidades indígenas de la zona.
Miguel Orellana, representante de la CONADIMCHH, encabezó la toma del Parque Arqueológico de Copán Ruinas, destacando que esta acción responde directamente al incumplimiento del gobierno en los acuerdos previamente pactados con el pueblo indígena maya y chortí.
La protesta ha generado importantes afectaciones a la economía local. Los bloqueos establecidos en la CA-11, principal vía de acceso a Copán Ruinas, han provocado congestión vehicular significativa que impacta tanto a turistas nacionales e internacionales como a comerciantes de la zona. Adicionalmente, la toma del parque arqueológico, uno de los principales atractivos turísticos y culturales de Honduras, ha paralizado las actividades normales del sitio histórico.
Los líderes indígenas han sido enfáticos en su determinación de mantener las medidas de presión hasta obtener respuestas concretas. «Queremos soluciones, no promesas. Si el Estado no nos escucha, seguiremos aquí el tiempo que sea necesario», advirtieron los manifestantes, quienes hasta el momento no han recibido confirmación oficial sobre el envío de representantes gubernamentales para atender sus demandas.